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Begoña –
Es un libro estupendo. Me ha parecido además ideal para el día del padre, ya que el libro es una escena de cariño entre padre e hijo. Desde luego a mí me ha parecido muy tierno.
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El libro comienza con un padre preguntando a su hijo que ha pasado con la tarta que había preparado. Vemos trozos de tarta repartidos por la cocina y encima del niño. El hijo comenzara a contar una historia loca de pingüinos que le raptar Y llevan de viaje por el mundo hasta acabar en la nieve. Escaleras una montaña y acabarán haciendo una guerra de bolas de nieve contra unos canguros con esquíes. ¿Sabéis quién gana? Yo no os lo contaré Para eso tendréis que leerlo pero si os cuento que lo celebrarán comiendo la tarta, y eso que el niño intentará impedirlo de todas las maneras posibles.
Padre e hijo acabarán haciendo otra tarta gigante aunque me pregunto si volverán a comérselas los pingüinos o canguros.
Creo que es una historia muy divertida y estupenda para contar padres e hijos.
A mis hijos les ha gustado tanto al pequeño como a los mas mayores. Divertido, imaginativo y con un padre paciente y cariñoso
Libezzy –
En la historia conoceremos a Albert, un niño manchado de tarta junto a sus restos que asegura que él no se la comió. Su padre le hace preguntas intentando averiguar qué fue con lo que ocurrió realmente y él le cuenta una historia de lo más inverosímil: ¡fue secuestrado por pingüinos y arrastrado por el mundo dentro de un bote de mermelada!
La historia es de lo más disparatada y Albert tiene respuestas para todas las preguntas. Me ha parecido un enfoque muy original pues es una historia con grandes dosis de imaginación que coincide con las ideas o los sueños de los niños.
El cuento está narrado en forma de diálogo entre Albert y su padre. Aunque no hay descripciones propiamente dichas, el niño actúa como el narrador respondiendo cómo ocurrió todo.
Las ilustraciones son divertidas y llenas de color. Además, la gama cromática elegida me ha parecido preciosa.
Después de leer la historia hemos tenido un debate muy interesante sobre lo ocurrido en el que cual surgió la gran pregunta: ¿fue Albert quien se comió el pastel o su historia es cierta? Algunos niños afirman que el niño es un mentiroso y fue él quien se la comió; otros defienden que su historia es cierta (es verdad que ningún niño cabe en un bote de mermelada, pero en los cuentos sí) y otro niño aprovechó para hablar sobre los amigos invisibles, los cuales podrían explicar muchas cosas.
También hemos debatido sobre la importancia de no acusar a alguien sin pruebas y hemos jugado a los detectives analizando con lupa los restos a ver si encontramos alguna prueba que nos lleve hasta los responsables. No hemos tenido ningún resultado fiable aunque sí algunas hipótesis ¿por qué nadie se ha fijado en la tortuga de la cocina? Y, lo más importante, hemos descubierto un nuevo misterio a resolver: ¿Dónde está el zapato de Albert?
Espero que las nuevas relecturas puedan arrojar más luz sobre este asunto o bien plantearnos nuevas incógnitas y debates interesantes.
En definitiva, ¿Dónde está la tarta? es un libro con un misterio y una versión extravagante de cómo ocurrió todo que resulta muy divertida y sacará más de una sonrisa a los más pequeños de la casa.